La Nación se salva de pagar US $ 3,4 millones por pleito de Banestado
La Nación se salva de pagar US $ 3,4 millones por pleito de Banestado
Fuente: EL ESPECTADOR (Ver Noticia Original)
Fallan caso de 1982 por supuesta deuda. En proceso figura Eduardo Zambrano, condenado por Odebrecht. Un juzgado de Cáqueza, Cundinamarca, falló en primera instancia un millonario pleito que data de hace 28 años y pone en riesgo el erario. Se trata de uno de los cobros que la firma Coloca International Corporation S. A. le venía haciendo al desaparecido Banco del Estado, por unos supuestos giros en dólares antes de que la entidad fuera liquidada por orden del Gobierno.
“La Nación, a través de Fogafín, había hecho una provisión (reserva) por si era condenada. Pero con el fallo, la Nación se acaba de ahorrar unos 3,4 millones de dólares de la época que hoy son una suma fabulosa”, le explicó a EL TIEMPO César Jaime Gómez Jiménez, apoderado del banco.
En efecto, la empresa Coloca (vinculada a Jorge Castro) reclama cuatro desembolsos que –con intereses de mora– alcanzan una cifra extraordinaria.
El primer giro de este caso data de 25 de julio de 1982. Y, según la demanda, todos los desembolsos fueron a dar a una cuenta corriente de la entidad, en el City Bank de Nueva York.
Como supuesta prueba de la deuda, los demandantes anexaron cartas suscritas por un alto ejecutivo del banco que dio fe de los desembolsos y de los millonarios intereses pactados.
“Se pagará irrevocablemente la deuda”, dicen las misivas, que se convirtieron en una especie de ‘prueba reina’ en la multimillonaria demanda.
Este diario tuvo acceso al expediente y estableció que el ejecutivo que firmó las cartas es Eduardo José Zambrano Caicedo. Se trata del mismo condenado por su participación en la repartija de sobornos de la multinacional Odebrecht.
En esa época, Zambrano tenía el cargo de vicepresidente ejecutivo del banco, y la Unidad Investigativa de EL TIEMPO lo señaló de formar parte de una trama de autopréstamos. A pesar de ello, y de que Zambrano fue condenado en 1996 por estafa agravada dentro del escándalo por la crisis financiera de los 80, sus cartas se convirtieron en pruebas de la millonaria reclamación.
La demanda contra el Banco del Estado fue admitida en 1986, y mientras esta avanzaba, Zambrano –miembro de una acomodada familia de Popayán y del club El Nogal– volvió a entrar en escena.
Tras permanecer unos años oculto, Zambrano se convirtió en próspero contratista del Estadoa través de la firma Consultores Unidos S. A. Y, a la vez, empezó a mover los sobornos de Odebrecht.
Para abreviar la historia, solo en 1991 se ordenaron pruebas dentro del pleito con el Banco de Estado, que culminaron en 2013, cuando se dio vía libre a los alegatos de conclusión.
La Nación, a través de Fogafín, había hecho una provisión (reserva) por si era condenada. Pero con el fallo, la Nación se acaba de ahorrar 3,4 millones de dólares de la época
La defensa del banco pasó por varias manos, y en la última etapa estuvo a cargo del abogado Gómez, quien siempre alegó que nunca fue un préstamo del banco, sino un negocio entre Coloca y dos funcionarios de la entidad (Jaime Mosquera y Eduardo Zambrano) que usaron los fondos para adquirir acciones del Banco Comercial Antioqueño.
Entre los documentos que inclinaron la balanza a favor de la entidad está una certificación del Banco de la República en la que consta que Coloca nunca estuvo autorizada para manejar en el país ni en el exterior depósitos en moneda extranjera mediante el sistema de cuenta corriente ni fondo rotatorio.
La Superbancaria, ahora Superfinanciera, certificó dentro de este proceso que en sus archivos no había registro a nombre de la firma Coloca.
Sin embargo, los demandantes anexaron al proceso los cheques que prueban –según ellos– las transacciones y la deuda.
Pero un grupo de peritos rastreó las operaciones cambiarias y concluyó que estas nunca se ajustaron a las normas ni tenían autorización de las entidades de control, lo que llevó a concluir dentro del proceso que fueron usadas para adquirir acciones del Banco Comercial Antioqueño.
Coloca acaba de apelar
Además, en su declaración, el propio Zambrano puso en entredicho el contenido de las cartas que él firmó. Dijo en una declaración que no se atrevía a afirmar bajo juramento que el contenido de estas era el correcto. Además, en una vieja declaración, dada desde Ecuador, admitió que parte del dinero fue para la adquisición de las acciones de otra entidad.
El 30 de junio, la juez del caso –Briyit Acosta– negó las pretensiones de Coloca contra el banco, y acaba de notificar el fallo.
Además, condenó a sus dueños a pagar los costos del proceso, por 500 millones de pesos.
El Tribunal Superior de Bogotá definirá la apelación, y aún queda el recurso de casación.