Los audios que evidencian la corrupción de concejales en Cartagena

Los audios que evidencian la corrupción de concejales en Cartagena

Fuente: SEMANA (Ver Noticia Original)

El excandidato del Partido Verde a la Alcaldía de Cartagena, Fabio Castellanos, le habría exigido a una concejal de esa colectividad que le consiguiera un cargo para su esposa.

De la corrupción política en Cartagena parece no escapar nadie. En la audiencia de imputación de cargos al alcalde Manolo Duque Vásquez, junto con la contralora Nubia Fontalvo, al concejal Jorge Useche Correa y al hermano de crianza del alcalde, José Julián Vásquez, la Fiscalía ha divulgado un centenar de audios con evidencias comprometedoras. En estos se escuchan los presuntos arreglos burocráticos y entrega de dineros con destino a los concejales, a cambio de elegir como contralora a Fontalvo, que se encarga del control fiscal del manejo de los recursos públicos.

Esta semana se conoció un audio entre Jorge Useche, el concejal conservador que habría servido como puente entre los distintos actores, y su colega Angélica Hodge, de la Alianza Verde, ella le manifiesta su preocupación por las exigencias que le estaría haciendo Fabio Castellanos, excandidato de su colectividad en las pasadas elecciones, para que le gestionara un cargo a su esposa, Yaneth Simancas, en la administración distrital como cuota del los verdes.

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En la conversación Angélica Hodge le dice a Useche que está en un lío porque no ha podido conseguirle un puesto a la esposa de Castellanos.

—Me he metido yo en un lío.

—¿Por qué?

—Tengo un culo de lío con la mujer de Fabio Castellanos.

—¿Por qué, qué te pasó?

—Primero, el compromiso era Nelly y la jurídica del DATT y José Julián me dijo que eso se lo dieron a Tony (otro de los concejales) vamos a buscar otro espacio porque la vieja venía ahí antes (…) entonces le dijo a mi papá no el Ider, Lorenzo ahí en el Ider (…) bueno hoy voy donde Estelita y me dice que Ider está completo, imagínate eso no se puede porque yo pienso que ella está manejando también eso, entonces me dice, yo no estoy manejando Ider, pero lo que tengo entendido, eso ya está comprometido, eso no se puede; entonces me dice ahora Angélica, porque yo tengo una pelada en Educación. Pero ella está en licencia de maternidad no la pueden sacar, ya entonces mi amor tendría que esperar que la vieja la podamos sacar y metemos a Yaneth (…) pero Fabio no va esperar, Fabio es el tipo más incómodo del mundo.

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De acuerdo con los audios, Hodge habló con Luz Stella Cáceres (Estelita), hija del exsenador Javier Cáceres y secretaria del distrito hasta el pasado mes de junio, para gestionar el puesto de la esposa de Castellanos, pero Cáceres le había dicho que tanto en el Departamento Administrativo de Tránsito y Transportes (DATT) y en el Instituto de Deportes y Recreacion de Cartagena de Indias (Ider) no había espacio. Sin embargo, Hodge dice que de pronto en la Secretaría de Educación podría encontrarle un cupo, pero tendría que esperar a que una funcionaria que estaba embarazada terminara su licencia de maternidad para poderla despedir.

Angélica Hodge, preocupada le dice a Jorge Useche que con Castellanos es imposible tener paciencia y que eso tiene que ser para ya.

—Fabio Castellanos es el marido de Yaneth Simancas, ese manda, ya sabes que Fabio manda en el partido mío, mira todo el mierdero cuando quinto (…) todo ese mierdero lo armó Fabio, Fabio lo armó, revolucionó al partido que mejor dicho, porque Fabio es así peligrosísimo, él coge y **** hace entonces hay que tenerlo bien.

—¿Y entonces tú qué vas hacer?

—Imagínate el lío que tengo yo, si fuera otra persona, ok, pero con este man (…) entonces dijo ‘voy hablar con el partido para que te declares en oposición’. Dime tú, yo qué hago ante eso.

La concejal cartagenera le contó a Useche que de no encontrarle un puesto a la esposa de Castellanos su carrera política podría estar en riesgo.

—Tú no conoces a Fabio Castellanos.

—Nunca he lidiado con ese tipo.

—Mira, Fabio empieza y se dedica a ir a todas las emisoras a hablar mierda, que no sé qué ta-ta-ta a criticar el Gobierno a perseguirlo.

—Dijeron que el 30 le daban eso.

—Mira eso con él no es así, créeme que no es así (…) ese man hace que me llame Claudia (López).

—Porque no hablas con Javier que te dé el espacio del Concejo.

—Yo salí con full amargue de ahí, ni siquiera me adelantes una OPS y nada cuadra todo y si yo tengo que renunciar, renuncio porque esta gente ajá (…) yo no pudo hacer nada, tengo que cuidar mi credencial…

En medio de la conversación, Useche le preguntó a Hodge qué le dijo finalmente Luz Stella Cáceres sobre el puesto para la esposa de Castellanos. Hodge, preocupada, le confesó que de no cumplir con las exigencias del dirigente de la Alianza Verde él la indispondría con los directivos nacionales del partido, entre ellos Antonio Sanguino y Claudia López. Según Hodge, esto con el objetivo de que la obliguen a declararse en oposición a la administración del alcalde Manolo Duque.

—Entonces ¿qué te dijo Luz Stella?

—No, no que mañana habla con José Julián porque o sino yo no puedo coger nada.

—Pero José Julián está de viaje.

—Sí. Está en Bogotá y ajá, no va hacer lo que Fabio pretende, porque dime tú si a mí me llama Navarro y me llama Claudia López y me llama todo el mundo del partido … me toca hacer oposición, porque no puedo hacer más nada.

Quiénes son Angélica Hodge y Fabio Castellanos

Cuando la Alianza Verde le dio el aval a Fabio Castellanos como candidato a la Alcaldía y a Angélica Hodge como candidata al Concejo, en Cartagena acusaron al partido de tener un doble discurso: uno de moralidad y otro de conveniencia. Esto porque según sus críticos, a la hora de escoger a sus candidatos a los cargos de elección popular apelaron a personas con militancia reconocida en movimientos y grupos con prácticas clientelistas de vieja data.

Si bien se sabía poco de Angélica Hodge, quien no había aspirado a cargos de elección popular, se conocía la trayectoria de su padre Lorenzo Hodge, concejal durante dos periodos por el Partido de la U. En ese orden de ideas, la Alianza Verde terminó dándole el aval a la hija de un simpatizante y militante de la poderosa y polémica casa García Romero.

Fabio Castellanos, por el contrario, tiene una amplia trayectoria en la administración pública que se remonta a finales de los años noventa. Fue personero distrital, secretario de despacho y procurador delegado para la Vigilancia Administrativa, con el apoyo del exsenador Javier Cáceres Leal, durante el primer periodo de Alejandro Ordóñez.

Castellanos aspiró en 2015 a la Alcaldía por los verdes y obtuvo 3.891 votos, mientras que la lista al Concejo del partido logró 14.261 votos, lo que le permitió elegir a Angélica Hodge.

En diálogo con la W Radio, este martes, Fabio Castellanos desmintió que le hubiera hecho esas exigencias a Angélica Hodge para beneficiar a su esposa, Yaneth Simancas,  y afirmó que lo que pasa es que él ha sido crítico con la administración. Simancas, es hija del exgobernador Libardo Simancas, liberal (2004 – 2006), condenado por la Corte Suprema por parapolítica.

Castellanos agregó que apenas pasaron las elecciones se fue a Bogotá, en donde ejerce su profesión de abogado. Dijo que las acusaciones de Hodge en su contra son falsas, porque su esposa ha estado vinculada a la administración distrital desde el año 2002 y denunció que en Cartagena lo que hay es una cacería de brujas para descalificar a los posibles aspirantes a la Alcaldía, en caso de que la Procuraduría General de la Nación destituya a Manolo Duque.

Sobre este escándalo, SEMANA contactó a la senadora y precandidata presidencial Claudia López, y preguntó sobre el estatus político de la concejal Angélica Hodge, que fue separada del partido por las investigaciones en su contra.

«No le podemos quitar la curul como tal, pero sí la vocería y el voto. El cargo lo perderá cuando la detengan», dijo López a SEMANA.

La senadora se había manifestado previamente en dos trinos sobre este caso, expresando su malestar por el uso de su nombre en las amenazas y asegurando que los involucrados en ese diálogo deben ser denunciados ante la Fiscalía y sancionados dentro del partido, para quitarles cualquier representación o vocería.