Cartel de hemofilia Lyons niega su participación en el caso
Cartel de hemofilia Lyons niega su participación en el caso
Fuente: EL NUEVO SIGLO (Ver Noticia Original)
El exgobernador de Córdoba no rendirá descargos ante la Contraloría y dijo que se enteró del caso de corrupción 6 meses después de dejar su cargo
Durante la audiencia verbal que rindió ante la Contraloría, el exgobernador de Córdoba, Alejandro Lyons, negó su participación en el caso de corrupción que terminó con el robo de 54 mil millones de pesos del presupuesto de esa región, conocido como el ‘Cartel de la hemofilia’.
El exfuncionario se negó a rendir descargos en el proceso de responsabilidad fiscal por el monto de dinero que le sigue la Contraloría en el caso.
El abogado Alvaro Lyons Villalba indicó que el auto de imputación de la Contraloría no dice cuáles fueron los hechos y los cargos puntuales por los que se acusa a Alejandro Lyons.
Por su parte, Lyons aseguró que se enteró del caso de corrupción 6 meses después de salir de la gobernación.
«Me enteré en el año 2016 a raíz de una auditoría que estaba haciendo la Contraloría porque en las demás auditorías, del 2013 al 2015, jamás emitió una alerta o denuncia puntual de estas irregularidades», dijo Lyons a través de videoconferencia.
“De esos hechos tuve conocimiento en el año 2016, cuando se ofició a la Gobernación de Luis Besaile por parte de la Contraloria, que supuestamente habían detectado unos exámenes médicos y unos laboratorios falsos. Allí fue el primer momento en el que tuve conocimiento, es decir 6 meses después de haber salido de la Gobernación“, agregó Lyons.
Igualmente, aseguró que antes de que la Contraloría hiciera pública la existencia del cartel, interpuso una denuncia en la Fiscalía:”yo formulé una denuncia en la unidad anticorrupción de la Fiscalía antes de que la Contraloria publicara los hallazgos“.
En una auditoría de la Contraloría, el organismo de control decidió imputar responsabilidad fiscal contra el exgobernador y demás involucrados, por los pagos efectuados por la Gobernación de Córdoba por 117 supuestos enfermos, que en realidad gozaban de cabal salud, porque los exámenes de laboratorio que se usaron como soporte de esos pagos resultaron falsos en su totalidad.