La turbia licitación en el Meta que toca al senador ‘Manguito’
La turbia licitación en el Meta que toca al senador ‘Manguito’
Fuente: EL TIEMPO (Ver Noticia Original)
Filtran datos reservados de proceso por 16.000 millones de electrificadora. Habla el Congresista. A mediados de junio, en plena pandemia, empezó a circular un video en el que miembros del sindicato de la Electrificadora del Meta (Emsa) se quejaban por la supuesta ‘toma’ burocrática de la empresa por parte del senador Jonatan Tamayo, conocido como Manguito.
El congresista –elegido en la lista petrista de Decentes y que terminó alineado con el oficialista Centro Democrático– guardó silencio ante las protestas y nunca se pronunció sobre la supuesta entrega de la electrificadora como su cuota por el brinco político.
Pero hay un nuevo episodio que lo vuelve a vincular con Emsa y, ahora, con conductas que tienen implicaciones penales.
EL TIEMPO accedió a una auditoría reservada en la que la firma Ratsel le informa a la junta directiva de la electrificadora –cuyo principal accionista es el Estado– que hubo filtración de información reservada de un proceso licitatorio por 16.000 millones de pesos.
Es el 066 de 2020, con el cual Emsa buscaba adjudicar los servicios de recaudo y facturación de energía, que durante los últimos tres años han estado en poder de la firma Sypelc.
Si bien el proceso se declaró desierto porque ninguno de los proponentes logró los puntajes, lo consignado en la auditoría ya le costó la cabeza a un directivo de Emsa y pone los reflectores sobre el senador Manguito.
Según el documento, de la cuenta de correo empresarial del gerente comercial, Wilson Patiño, salieron 81 mensajes electrónicos –entre el 25 de agosto de 2019 y el 14 de mayo de 2020– con información clasificada del proceso licitatorio e incluso con datos reservados de la firma que actualmente factura el servicio de energía.
De acuerdo con la firma auditora, varios de esos correos terminaron en la cuenta personal de un tercero no relacionado con Emsa y que resultó siendo una funcionaria de la Unidad de Trabajo Legislativo (UTL) de Manguito.
EL TIEMPO estableció que el destinatario es Jorge Armando Perilla, promotor político de Manguito y contratista de la Comisión VI de Senado, donde tiene su curul el congresista.
Pero el correo al que se le envió la información (jorgearmandoperillab@gmail.com) es el mismo que registró en su hoja de vida Diana Carolina Márquez Sterling, pareja de Perilla y actual asesora grado V de la UTL de Tamayo.
“Se registró fuga de información evidenciada mediante el envió de documentos sensibles del proceso a correos electrónicos personales y del envió de información estratégica de uno de los oferentes dentro del proceso a un tercero por parte del gerente comercial”, dice la auditoría.
El senador le admitió a EL TIEMPO que Diana Márquez trabaja en su UTL y que él también tiene una estrecha amistad con Perilla, destinatario de los correos. Incluso, aceptó que conoce al ahora exgerente comercial de Emsa, pero advirtió que todos le garantizaron que no habían cometido ninguna irregularidad y que espera que eso lo demuestren las investigaciones.
En todo caso, la junta directiva de Emsa le pidió la renuncia a Patiño. Según la auditoría de Ratsel, se demostró “incumplimiento de obligaciones contractuales de cuidar los intereses de la compañía; violación a obligaciones de reserva sobre información; incumplimiento de obligacionesde confidencialidad, manejo de información e información sometida a reserva”.
En medio de esta controversia, que ya ha sido abordada en al menos tres juntas directivas de Emsa –con la presencia del delgado del Ministerio de Hacienda como máximo accionista–, se ventilaron más irregularidades que tocan a otros dos altos cargos de la electrificadora.
Por un lado, está la abogada del proceso, Yael Calderón, quien además es la secretaria general de Emsa y miembro de Sintraelecol, por lo que se le reconoce fuero sindical. Según la auditoría, argumentó excesiva carga laboral para justificar las fallas que se le endilgan en el manejo de información sensible y que terminaron por facilitar las filtraciones.
Además, se halló evidencia de que habría fallado en la protección jurídica del proceso al permitir que personas ajenas revisaran las propuestas de los proponentes. Eso, según Ratsel, derivó en posible negligencia.
El otro alto cargo bajo la lupa es el gerente general de Emsa, Carlos Rodríguez, a quien se señala de no aplicar los protocolos requeridos para evitar manipulaciones del documento base de invitación (DBI) del proceso contractual.
Rodríguez le dijo a EL TIEMPO que Emsa no perdió dinero porque el proceso se declaró desierto y se firmó un otrosí con Sypelc.
“Tomamos los correctivos y estamos abiertos a las investigaciones. Y sí conozco al senador Tamayo, al igual que a otros políticos del Meta, pero ninguno tiene aquí cuotas políticas”, precisó el gerente de Emsa.
Por ahora, la junta directiva de Emsa –en la que también tiene acciones el Grupo de Energía de Bogotá– evalúa si se deben o no aplicar sanciones al gerente y a la secretaria general. Y el caso ya pasó a conocimiento de los organismos de control.
Tanto en la gobernación del Meta como en el Ministerio de Hacienda aseguraron que están analizando los alcances de la auditoría y que esperan el resultado de todas las investigaciones.
El senador Jonatan Tamayo, ‘Manguito’, dijo que tanto su asesora como el esposo, amigos personales suyos, le garantizaron transparencia en sus actuaciones.
También afirmó que no tiene cuotas con el Gobierno y que está seguro de que todo esto es una persecución política.
“Si se demuestra algo irregular, pues que respondan, pero hasta ahora no hay nada sólido y ni yo estoy metido en nada de Emsa”, precisó.