Los concejales en un debate de control cuestionaron el contrato 1125 de 2020 entre el Instituto de Salud de Bucaramanga, Isabu, y la empresa Oro Visión Ltda.
“Encontramos graves irregularidades en el desarrollo del Plan de Intervenciones colectivas, tres contratos donde hubo colusión, direccionamiento contractual, falta de idoneidad por parte del contratista y sobrecostos”, aseguró el concejal Carlos Parra, durante su intervención.
Y agrego: “El contrato 1125 de 2020 por $219 millones cuyo objetivo era la prestación de servicios de logística para el desarrollo del contrato interadministrativo 156 que inició el 18 de noviembre de 2020. Encontramos que se alquiló un parlante con micrófono de 800 wattios por $74 millones cuando un parlante así se consigue en un millón de pesos”.
Tras las denuncias la Contraloría de Bucaramanga inició una investigación preliminarpara determinar si existen irregularidades de tipo fiscal y la identificación de presuntos responsables.
«Más allá estamos fortaleciendo los manuales de contratación de los institutos descentralizadospara que la contratación sea abierta y pública, y vamos a seguir trabajando para que no haya ningún tipo de dudas en la contratación», expresó.
