Clan Úsuga se sometería a la justicia
Clan Úsuga se sometería a la justicia
Fuente: EL TIEMPO (Ver Noticia Original)
Tras la muerte de Roberto Vargas, alias Gavilán, cabeza del ala más guerrerista del ‘clan Úsuga’, Dairo Antonio Úsuga David, alias Otoniel, máximo jefe de la banda buscó contacto con el Gobierno para lograr un sometimiento a la justicia.
Se trata de un sometimiento jurídico que no implica en ningún momento reconocimiento político. En ese orden de ideas, el capo y sus lugartenientes solo podrían aspirar a las rebajas de pena por sometimiento y colaboración con la justicia.
«El 3 de septiembre recibimos del jefe del ‘clan del Golfo’ manifestación expresa de someterse a la justicia, no sería una negociación política. Si se someten pueden tener algunos beneficios», dijo Santos.
El presidente señaló que el Fiscal General entrará a evaluar la solicitud.También dijo que contra el clan hay operaciones concretas y que están concentrados en los objetivos de alto valor con resultados tan efectivos como el de ‘Gavilán’. Se han capturado más de 1.500 hombres de la organización.
También dijo que desde mediados del año pasado se vienen recibiendo mensajes sobre la intención, del hoy principal cartel de la cocaína en Colombia, para someterse a la justicia.
Esta es la vía que usaría el ‘clan Úsuga’ para someterse a la justicia
La figura del sometimiento a la justicia, que es el único camino que tendrían ‘Otoniel’ y los otros capos que sobreviven de la banda criminal surgida hace una década, tras el proceso de paz del gobierno Uribe con los paramilitares, no es nueva en la legislación colombiana.
De hecho, se estrenó con el capo Pablo Escobar a comienzos de los 90 y en su momento, a cambio de la no extradición, permitió que el entonces narco más poderoso del mundo suspendiera su oleada de narcoterrorismo. Escobar, en medio de una polémica negociación, se entregó con algunos de sus más poderosos secuaces y fue recluido en una cárcel, conocida como La Catedral, desde donde siguió mandando hasta su fuga y posterior muerte, en diciembre de 1993.
Desde ese momento la figura ha tenido varios cambios legales, pero en esencia se mantiene su espíritu: el narcotráfico es un delito común y como tal los narcos pura sangre, los que ejercen esa actividad con el único fin de enriquecerse, no tienen derecho a tratamiento político. Esto es, no pueden ser beneficiarios de beneficios como indulto y amnistía.
La legislación penal contempla, en todo caso, gabelas penales para quienes se someten a la justicia. Así, por aceptar los cargos en su contra, que incluyen además de narcotráfico homicidios, masacres y concierto para delinquir, los capos del ‘clan Úsuga’ podrían recibir rebajas de hasta la mitad de la pena.
Por colaboración con la justicia, además, podrían aspirar a la aplicación de figuras como el principio de oportunidad, reservado para quienes colaboran con el desmantelamiento de organizaciones criminales. En todo caso, al ser ellos las cabezas de la red tendrían que entregar información que permitiera golpear organizaciones más poderosas, algo que solo sería viable si apuntaran a delatar fichas de los grandes carteles internacionales. Además, deberán entregar sus fortunas ilegales.
Con esas cuentas, para ‘Otoniel’ y su banda difícilmente se abriría un escenario menor a los 15 años de prisión y por el sometimiento no se librarían tampoco de la extradición.
Pero la opción de seguir en el delito tampoco es llamativa ya para ellos. La suerte de ‘Gavilán’, muerto el pasado jueves en una quirúrgica operación de la Policía, y la similar de otras cabezas de la banda les han demostrado que la opción a no someterse a la justicia puede ser la muerte en combate y la constante zozobra para sus familias.
El jefe de la organización
Las autoridades colombianas ofrecen una recompensa de 3.000 millones por información que conduzca a la captura de ‘Otoniel’, mientras Estados Unidos tiene una oferta de 5 millones de dólares.
El capo fue incluido en el 2013 en la Lista Clinton de EE.UU, junto a los más peligrosos narcotraficantes y blanqueadores de dinero en el mundo. Las armas les han permitido al ‘clan Úsuga’ realizar paros armados en la región con lo que logran impedir las actividades productivas, principalmente con prohibiciones de libre circulación de vehículos y personas.
Esa organización también está sindicada de matar a más de 10 policías a través de lo que llaman ‘plan pistola’ como forma de retaliación por los operativos que las autoridades llevan en su contra.
Un número significativo de hombres del ‘clan’ estuvo en las filas del Epl en los 90, luego de las autodefensas y pasó de la organización liderada por ‘Don Mario’: las llamadas Autodefensas Campesinas del Casanare, al grupo de los hermanos Juan de Dios y Dairo Antonio Úsuga David.
‘Otoniel’ quedó a cargo de la banda luego de que su hermano fuera abatido el primero de enero del 2012 en un operativo realizado cuando la familia celebraba el fin de año.
El Otoniel, de 45 años, tiene siete órdenes de captura por narcotráfico, terrorismo, concierto para delinquir y homicidio.