A la cárcel los 8 capturados por el cartel del IVA
A la cárcel los 8 capturados por el cartel del IVA
Fuente: W RADIO (Ver Noticia Original)
Con facturas ilícitas por 706 mil millones de pesos elaboradas para 1.970 clientes fue evadido el pago del impuesto del IVA a la Dian.
Durante Cinco años los imputados establecieron una estrategia ilegal para defraudar en el pago de impuestos. Con empresas de papel que físicamente no existían pero elaboraron facturación por 706 mil millones de pesos. A pesar que no tenían mercancías en bodega o productos físicos sus facturas soportaban una actividad comercial ficticia como si en realidad vendieran bienes y servicios. La organización recibía un porcentaje de acuerdo al valor de cada factura falsa que variaba entre el 2.5 y el 12% de acuerdo al cliente.
La investigación encabezada por la fiscal 39 de la unidad de lavado de activos tardó dos años para establecer el modo que funcionaba la organización delictiva y como ocultaba su delito.
Fue establecido que en torno a ocho personas estaban los despachos ficticios. Cinco directos relacionados y tres intermediarios.
La Fiscalía con interceptación de llamadas telefónicas legales, búsqueda en bases de datos y análisis financieros estableció que la banda contaba con mando, jerarquía, funciones específicas y roles establecidos. Ninguno de los imputados aceptó cargos.
INTEGRANTES DE LA BANDA.
– Olga Lucía Díaz Guzmán. Alias La Patrona. Era la líder principal. Presidenta de algunas empresas de papel. Imputada por Concierto para Delinquir con fines de enriquecimiento ilícito, Enriquecimiento Ilícito de particulares y Falsedad en Documento Privado como delito continuado.
– Katherine Angélica Contreras Quevedo. Era la persona que elaboraba las facturas falsas y atendía los requerimientos de los llamados clientes. También ayudo a crear empresas y era representante legal de varias de ellas. Imputada por Concierto para Delinquir con fines de enriquecimiento ilícito, Enriquecimiento Ilícito de particulares y Falsedad en Documento Privado como delito continuado.
– Carlota Elisa Quevedo Guzmán. Tenía poder de decisión en la facturación, ordenaba elaboración de talonarios. Encargo de crear empresas de papel. Atendía requerimientos ante la Dian. Imputada por Concierto para Delinquir con fines de enriquecimiento ilícito Enriquecimiento Ilícito de particulares y Falsedad en Documento Privado como delito continuado.
– John Jairo Salazar Marín. Persona de confianza de Olga y Carlota. Uso su nombre para representar empresas fachadas. Realizó cobro de 146 cheques y 67 depósitos en efectivo por valor aproximado de seis mil millones de pesos. Imputado por Concierto para Delinquir con fines de enriquecimiento ilícito, Enriquecimiento Ilícito de particulares y Falsedad en Documento Privado como delito continuado.
– Cristián Eduardo Zafra Reyes. Contador y experto en temas Tributarios. Brindaba la asesoría necesaria para satisfacer las necesidades de los clientes y diseñaba las estrategias para evadir controles y requerimientos de la Dian. Imputado por Concierto para Delinquir con fines de enriquecimiento ilícito y Enriquecimiento Ilícito de particulares.
– Tránsito Gómez Chacón. Intermediaria. Traía clientes a la organización. Imputada por Concierto para Delinquir con fines de enriquecimiento ilícito.
-John Carlos Barbosa Cruz. Intermediario entre las empresas de papel y las empresas que solicitaban facturas espúreas. Imputado por Concierto para Delinquir con fines de enriquecimiento ilícito.
– Abel Medina Salcedo. Intermediario. Presentaba clientes y realizaba cobros por la facturación ilícita. Imputado por Concierto para Delinquir con fines de enriquecimiento ilícito.
La juez 17 de Control de Garantías decretó medida de aseguramiento contra los ocho capturados en establecimiento carcelario.
Las empresas fachadas estaban legalmente constituidas, tenían registro de Cámara y Comercio y mantenían al día sus obligaciones ante la Dian.
En su actividad ilegal tuvieron relación con 1.970 empresas naturales o jurídicas que si estaban legalmente constituidas, con actividad comercial real y con sede en varias ciudades del país.
La empresa delincuencial ofrecía una amplia gama de servicios de acuerdo a los requerimientos de los llamados clientes. A través de nueve empresas fachadas, algunas de las cuales aún están vigentes, realizaban facturación para la evasión del impuesto de renta e IVA, Renta y Complementarios en productos de ferretería, construcción, pintura, vidriería, asesorías tributarias y acompañamiento ante la Dian cuando hubiese requerimientos de esa entidad.