Condenan a exrepresentante legal de Factor Group por captación masiva
Condenan a exrepresentante legal de Factor Group por captación masiva
Fuente: EL ESPECTADOR (Ver Noticia Original)
El juzgado 30 Penal del Circuito de Bogotá sentenció a 13 años de prisión a David Wigoda Rinzler por estafar a 1.557 personas, por monto de $143.000 millones. El empresario está prófugo de la justicia en Israel desde hace cuatro años. La sentencia fue apelada.
Una pena de 13 años de prisión impartió el juzgado 30 Penal del Circuito de Bogotá al empresario David Wigoda por su responsabilidad en el escandalo de captación masiva ilegal de dinero desde la empresa Factor Group, de la que era representante legal, caso en el cual fueron estafadas 1.557 personas, por monto de $143.000 millones. El juzgado ordenó la captura del ingeniero civil que estableció desde 2004 un modelo de negocio el cual consistía en adquirir de personas o empresas con poca liquidez facturas, títulos, contratos, sentencias y órdenes de compra, que luego se vendían a terceros con óptimas utilidades.
En 2006, Factor Group realizó un negocio con Luis José Botero Salazar para la compra de unos terrenos en el Magdalena Medio por $25.000 millones que se pagaron con dineros de Fractor Group, con la idea de vender los terrenos y obtener una ganancia futura. Botero Salazar, para pagar la deuda que en 2010 ascendía a los $130.000 millones, adquirió un crédito y estructuró dos fideicomisos conformado por varios inmuebles.
Wigoda entonces ofreció a sus inversionistas activos al descuento que se identificaron como descuentos de flujos futuros, derechos de beneficio y derechos fiduciarios que supuestamente vendía o emitía Luis José Botero y pagaría a Acción Fiduciaria a través de los fidecomisos citados, con una rentabilidad entre el 12 y el 15 % efectivo anual. La justicia comprobó que en cinco líneas de negocio en total, los fideicomisos “Inmuebles Ganaderos”, “Ceba de Ganado”, “Grupo Monarca de la Selva”, “Luciérnagas” y “Salamandra”, Factor Group captó dinero de 1.557 inversionistas sin que existiera contraprestación o suministro de bienes y servicios.
Entre otros, se comprobó que los pagos realizados a los inversionistas no proveían de giros realizados por los fideicomisos sino por dineros que consignaban otros inversionistas. En ese sentido, los clientes de Factor Group fueron engañados pues se les presentó un modelo de negocio irreal ni les devolvieron su capital. En 2011, la empresa pionera en actividades de factoring fue intervenida por la Superintendencia Financiera que compulsó copias a la Fiscalía para que investigara las irregularidades. En juicio, se comprobó la existencia de la captación masiva.
“Factor Group ocultó que era el titular o el beneficiario de los fideicomisos “Inmuebles ganaderos” y “Ceba de Ganado” atendiendo que a sus inversionistas les indicó que el originador de los activos objeto de la operación era Unión Mutua y/o Luis José Botero Salazar, quien en verdad fue el fideicomitente y por su condición de deudor, quien canceló una cuantiosa obligación, no vendiendo ni ofreciendo en el mercado derechos fiduciarios o flujos futuros de ningún tipo. Ello significa que Factor Group de manera evidente tergiversó su posición, haciéndose pasar como intermediario cuando en verdad era su titular”, dice el fallo.
En 192 páginas, el Juzgado estableció que la operación que planteó Factor Group en esos dos fideicomisos no generó rendimientos ni utilidades y aun así, la empresa hizo pagos parciales a su inversionistas que no provenían de la renta, ni de la venta de inmuebles ni de la operación ganadera. “Lo que significa que el negocio subyacente fue irreal, como fuente de pago, al no ser el causante de los supuestos recursos que se reconocieron a los inversionistas”, dice la decisión. Los pagos vinieron de recursos que entregaban otros inversionistas.
“En otras palabras, lo que se probó en esta actuación es que el flujo futuro del cual se desprendía el pago de los inversionistas no dependía de los resultados de los fideicomisos, sino de la efectividad del engaño y el ingreso de clientes que inyectaran sus recursos en la operación que se estructuró como absolutamente rentable”, agrega la decisión. En ese sentido, se comprobó que el valor de los derechos fiduciarios o de flujos futuros que supuestamente vendía la empresa “fue absolutamente indeterminado pues en ninguna parte de la constancia de operación se indicaba cuánto valía su totalidad o su proporción”.
El abogado José Luis Giraldo dijo que Wigoda está prófugo en Israel, que la defensa del empresario apeló la sentencia y que todavía las víctimas no han podido recuperar el dinero. “De los $146.000 millones recibimos $25.000 millones en fiducia pero los bienes han sido muy difíciles de vender”, dijo.