Deportación de exparamilitar Hernán Giraldo fue autorizada: Ministro de Justicia

El ministro Wilson Ruiz dijo que la deportación del exjefe del Bloque Resistencia Tayrona de las Autodefensas fue aprobada por el Consulado General de Colombia en Houston (Estados Unidos).

El ministro de Justicia, Wilson Ruiz Orejuela, confirmó este viernes que el Consulado General de Colombia en Houston autorizó la deportación del exjefe paramilitar Hernán Girlado Serna, quién cumplió su condena por narcotráfico en los Estados Unidos y quien tiene órdenes de captura vigentes en Colombia por delitos relacionados con masacres, desapariciones forzadas, secuestros, homicidios, desplazamientos, accesos carnales violentos contra menores de edad y personas protegidas, además de otras acciones delictivas.

“El señor Giraldo Serna será deportado en los próximos días y entregado a Migración Colombia. El Gobierno está adelantando todas las coordinaciones para hacer efectivas las órdenes de captura una vez pise suelo colombiano. El Gobierno Nacional hace ingentes esfuerzos para que delincuentes que tanto daño han hecho al país, respondan ante la justicia y las víctimas por los delitos cometidos durante su militancia en las organizaciones armadas al margen de la ley”, dijo Ruiz.

En días pasados, el ministro Ruiz había indicado que desde el 10 de septiembre de 2020 iniciaron las gestiones diplomáticos para que se informara a las autoridades de Estados Unidos de la necesidad que que alias El Patrón�o El Jefe�regrese al país. De hecho, el Tribunal Superior del Distrito Judicial de Barranquilla reactivó en diciembre pasado la orden de captura en su contra y solicitó activar la circular roja de la Interpol. En esa ocasión, la Sala le impuso tres medidas de aseguramiento dada su autoría en 339 crímenes de guerra, actualizados entre 1982 y 1995.

Nacido el 16 de agosto de 1948 en San Bartolomé, Caldas, el fallo asegura que Giraldo Serna “era un depredador sexual que enfocó sus deseos morbosos y enfermos en niños, para él la infancia no existe, pues una niña de tan solo 13 años ya era suficiente para despertar sus deseos sexuales, los cuales satisfacía sin pudor alguno, sin la mínima consideración hacia los padres, quienes aterrorizados debían soportar ver a una niña jugar, antes de ser llamada por Giraldo para satisfacerlo sexualmente”. Además, tras probar que la conducta del comandante “era emulada por sus subalternos del grupo armado”, el Tribunal concluyó que la violencia basada en género tuvo una conexión con el conflicto, pues se utilizó como una forma de control.