Familia de Álex Saab fue trasladada a Moscú

La pareja sentimental del empresario barranquillero y otros de sus familiares salieron desde Caracas hacia la capital de Rusia, donde residen actualmente. Saab se codeaba en los círculos más prominentes de Barranquilla. Ahora es requerido por la justicia de Estados Unidos. El futuro de Alex Saab todavía no está definido. Mientras la justicia africana continúa evaluando las posibilidades del caso, la defensa trata de frenar una posible extradición a Estados Unidos por todos los medios posibles. La decisión está en manos de la Corte Suprema de Cabo Verde, encargada de determinar si le da la razón al Tribunal de Apelaciones de Barlovento que, el pasado 5 de enero, dio luz verde a la extradición de Saab a los Estados Unidos.

Sin embargo el equipo de abogados al servicio del empresario colombiano continúa moviéndose y, según lo confirmó la Agencia EFE, hace tres días los defensores le solicitaron a la justicia de Cabo Verde que suspendiera el proceso de extradición de Saab, señalado como presunto testaferro de Nicolás Maduro. “En el día de ayer presentamos una solicitud de suspensión del proceso de extradición contra el Embajador Saab ante el Tribunal Supremo de Cabo Verde”, indicó Pinto Monteiro, principal letrado de Saab en Cabo Verde.

La petición La petición se produjo después de que el pasado 5 de febrero se realizara una audiencia ante el Tribunal de Justicia de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO, bloque al que pertenece Cabo Verde) sobre el caso del empresario colombiano. Lo que explica la defensa del colombiano es que Cabo Verde debe esperar a que este tribunal defina lo relacionado con la supuesta inmunidad de la que goza Saab como embajador plenipotenciario en África, cargo que le fue otorgado recientemente, mientras se encontraba detenido.

Saab fue detenido el 12 de junio de 2020 cuando su avión hizo escala para repostar en el Aeropuerto Internacional Amilcar Cabral de la isla caboverdiana de Sal, tras una petición de Estados Unidos cursada a través de Interpol por supuesto blanqueo de millones de dólares. Un mes después, la Justicia caboverdiana autorizó su extradición a Estados Unidos, una decisión que su defensa apeló de manera inmediata.