JEP iniciará juicio por secuestro contra ex Secretariado de las Farc: Rodrigo Londoño, Antonio Lozada, Pastor Alape y otros
JEP iniciará juicio por secuestro contra ex Secretariado de las Farc: Rodrigo Londoño, Antonio Lozada, Pastor Alape y otros
Fuente: INFOBAE (Ver Noticia Original)
Los comparecientes ya habían aceptado responsabilidad en el caso 01 sobre toma de rehenes y graves privaciones de la libertad cometidas por la extinta guerrilla.
Rodrigo Londoño, Jaime Alberto Parra, Milton Toncel, Pablo Catatumbo Torres, Pastor Alape, Julián Gallo y Rodrigo Granda son los exintegrantes del último Secretariado de las Farc-EP, que deberán comparecer en juicio ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) por el delito de secuestro. El proceso deberá llevar a una sentencia contra los comparecientes.
Las condiciones de contribución a la verdad y la reparación hacen parte de las propuestas presentadas por los comparecientes consisten trabajos de desminado humanitario, búsqueda de personas dadas por desaparecidas, restauración ambiental del páramo de Sumapaz, y actividades transversales de dignificación de la memoria de las víctimas.
Estas deberán ser analizadas en el marco del SIVJRNR durante una audiencia, que una vez surtida se podrá emitir la sentencia. Esta constará de las obligaciones que tendrá que asumir los comparecientes en los proyectos que formularon tras las solicitudes expresadas por las víctimas del caso.
La Sala de Reconocimiento, en el documento de conclusiones, aprobó varios proyectos en los que los comparecientes explicaron sus labores, aunque desde un rol de liderazgo. Por tanto recomendó que se replanteen esas posiciones en torno a tareas específicas que sean afines con los procesos de reincorporación. El proyecto de los comparecientes convoca a que más firmantes de la paz puedan participar en la implementación.
El cumplimiento de las sanciones será verificado con el apoyo de la Misión de Monitoreo y Verificación de las Naciones Unidas; “estas sanciones deben tener el más alto componente reparador y restaurador para las víctimas”, señaló la JEP al dar a conocer el inicio de la etapa de juicio.
Este es el segundo caso que llega a juicio en el Tribunal de Paz tras los cinco años de su entrada funcionamiento. El primero fue por ‘falsos positivos’ en Norte de Santander, una de las seis zonas priorizadas en el Caso 03, que llevó a juicio a cinco coroneles, otros cuatro oficiales y suboficiales, además de un civil reclutador.
En este segundo juicio que corresponde al primer caso de secuestro, deberán comparecer Rodrigo Londoño, el último comandante de las Farc-EP de 2011 a 2016. Aunque ese fue el periodo de menor número de secuestros, fue miembro del Estado Mayor desde 1982 y del Secretariado desde 1986.
Pastor Lisandro Alape Lascarro, comandante del Bloque Magdalena Medio desde 1993, mismo año en el que ingresó a sermiembro del Estado Mayor Central y del Secretariado desde 2008.
Milton de Jesús Toncel Redondoconocido en la guerra como Joaquín Gómez, comandante del Bloque Sur de las Farc desde 1993, pasó a ser miembro del Secretariado desde el 2008 y del Estado Mayor Central desde 2005.
Jaime Alberto Parra Rodríguezconocido en la guerra como Mauricio Jaramillo o el Médico, último comandante del Bloque Oriental desde 2010 hasta su desmovilización, miembro del Estado Mayor desde 1993 y segundo al mando de uno de los mayores secuestradores, alias el Mono Jojoy.
Julián Gallo Cubillosconocido en la guerra como Carlos Antonio Losada, quien lideró las redes urbanas de la guerrilla en Bogotá desde 1984 hasta 2007, en2008 fue nombrado miembro del Estado Mayor Central y miembro del Secretariado en 2011.
Pablo Catatumbo Torres Victoria,comandante de la Columna Móvil Alirio Torres y miembro del Estado Mayor del Bloque Móvil “Arturo Ruiz” desde 1997. Fue designado titular del Estado Mayor Central en el 2000 y en el 2002, comandante de la Columna Móvil Arturo Ruiz.
Rodrigo Granda Escobar, miembro del Estado Mayor Central desde 1993 y desde 2011 suplente del Secretariado. Principalmente estuvo en Comisión Internacional, bajo una vida clandestina, sin uso de armas o uniformes.