Las camionetas de alta gama, Rolex y gemas que presume en redes el hombre que se hace llamar el nuevo ‘zar de las esmeraldas’ de Colombia

Videos de caravanas de camionetas Toyota Prado ingresando a las minas de Muzo y Maripí (Boyacá) con canciones de corridos prohibidos de fondo se han viralizado en redes sociales en los últimos días.

Al interior de uno de los vehículos va un hombre que se hace llamar el nuevo ‘zar de las esmeraldas’, quien ha empezado a aparecer en fotos y videos portando relojes Rolex y rodeado de piedras preciosas que asegura comercializar por varios países.

Aunque en redes solo se presenta como Alonso Porras, EL TIEMPO investigó y estableció que se trata de José Alonso Porras Cortés, un comerciante que aparece en videos con politicos de la región como la alcaldesa de Muzo, Ximena Castañeda y el gobernador de Boyacá, Carlos Amaya (ambos del partido Verde).

En las imágenes Porras Cortés asegura ser esmeraldero de Boyacá desde hace 35 años y se muestra vendiéndole gemas a ciudadanos mexicanos, chinos y estadounidenses. Además a comerciantes de varias ciudades de Colombia.

A nombre de Porras Cortés aparecen 5 oficinas en el centro de Bogotá, específicamente en la zona del comercio de esmeraldas en la Avenida Jiménez con calle 12. También dos lotes en Chiquinquirá, Boyacá y una camioneta Toyota Prado.

Los videos han llamado al atención por la forma en la que Porras presume abiertamente grandes lotes de esmeraldas, en momentos en los que se han registrado asesinatos de varios empresarios ligados al sector como el caso de Juan Sebastián Aguilar, conocido en la zona esmeraldera como ‘Pedro Pechuga’.Â

Y meses atrás por el crimen a manos de sicarios de Maximiliano Cañón, cerca al parque de la 93, en junio de 2022; del narcoesmeraldero Luis Caicedo en julio de 2021; de Claudio Silva Otalora, en noviembre de 2022  yÂde Jorge Enrique Gómez y su escolta Luis Alberto Gamboa Triana, en mayo de 2021, entre otros.

En uno de los videos que el comerciante sube a redes se le ve en una oficina y se le escucha decir a un hombre que posa junto a Porras Cortés: «Acá con el zar de las esmeraldas». A lo que el comerciante responde: «comprando este lotecito se reserva la procedencia de la mina».

A Porras también se le ve en las imágenes haciendo subastas de lotes de gemas, pesando las piedras preciosas y al interior de la minas en Muzo.

EL TIEMPO ubicó a Porras Cortés para preguntarle por qué se promociona en redes como el nuevo ‘zar de las esmeraldas’.

«¿Por qué no hacerlo? Boyacá es zona de paz y no hay guerra por esmeraldas. ¿Por qué vamos a pelear si es el territorio en el que nos hemos rebuscado todos? Entre más trabajo haya mejor para todos los empresarios», le dijo Porras Cortés a EL TIEMPO.

Cuando este diario le preguntó de quién era socio en las minas o cuál es la empresa con la que exporta a otros países, dijo: «Yo soy mi propio socio. Pero acá cualquier persona que tenga plata puede invertir. Por eso primeramente le doy gracias a Dios y los jefes«.

Porras además se abstuvo a responder si conoció o no al asesinado ‘Pedro Pechuga’ o quiénes son los jefes a los que refiere, entre ellos a Hernando Sánchez.

EL TIEMPO se comunicó con Óscar Baquero, presidente de Fedesmeraldas, entidad gremial que representa a los esmeralderos en Colombia, y empezó por afirmar que desconocía quién es Alonso Porras: «Él no tiene empresas vinculadas con nosotros«.

Y añadió que el apodo del ‘Zar’ representaba algo negativo en el gremio de empresarios esmeralderos: «Entre los empresarios ninguno se autoproclama como ‘el Zar’, además es lamentable ese tipo de clasificación porque se puede relacionar con una época violenta.ÂEl apodo se podría tratar de una campaña publicitaria por redes sociales».

Aunque Porras Cortés no quiso dar nombres de socios, EL TIEMPO estableció que aparece en la empresa inmobiliaria Finca Raíz la Esmeralda, con domicilio en el centro de Bogotá.

Este diario intentó comunicarse con el gobernador Carlos Amaya y con la Alcaldesa de Muzo, Ximena Castañeda para preguntarles por las fotos en las que aparecen con Porras Cortés, pero al cierre de esta edición no habían respondido.